jueves, 31 de mayo de 2007

túnel-trampa

Ésta es la última parte del sueño de hoy.
Resulta que yo era una especie de poli o investigador, que llevaba días intentando localizar a una persona, un testigo que se suponía que estaba ingresado en un hospital desde hacía años.

Pero no había forma de reunirse con él. Por fín, un conductor de autobús que sabía algo, acude fugazmente para revelarme que no le podía encontrar porque no se encontraba en la sexta planta... sino en el nivel -2, al que se accedía por otro portal más pequeño del edificio.

Me dirijo hacia allí acompañado de otro sujeto, funcionario del hospital, del que en un principio sospeché que tenía algo que ver con las trabas en mi investigación pero que resultó estar de mi parte.

Una vieja bruja nos acompañaba, bruja porque aquel lugar tenía grabados kabalísticos por doquier, y parecía un túnel excavado más que un sótano, a medida que bajábamos. Había extraños símbolos en las huellas de los escalones. Tras el primer tramo de escaleras, llegamos a un pequeño distribuidor del que partía otro tramo de escaleras.
La vieja abrió la puerta y se echó a un lado esperando para que bajáramos primero. Mi acompañante empezó a descender tranquilamente, pero yo tuve un mal presentimiento, sentí un impulso de empujarla y decirla "tú delante"... Lo intenté pero la vieja se hizo un buruño agachando la cabeza y anclándose en el sitio, y decidí ser más amable y no tan desconfiado. Empecé a bajar por las estrechas escaleras y...

A la vuelta del primer rellano resulta que aquello no tenía continuación. Las escaleras conducían a un fondo de saco. La puerta de arriba se había cerrado y la bruja nos había dejado encerrados en la galería subterránea.

Pero no había problema, porque como era un sueño, bien podía teletransportar un clon mío al otro lado de la trampa... o haber dejado un explosivo con temporizador en la entrada antes de empezar a bajar por si acaso... Pero sonó el despertador y no tuve tiempo de poner en práctica nada de eso.

Mientras me duchaba le estuve dando vueltas a la trampa. ¿Y qué pasaría si en un momento dado el muro del fondo de saco se abriera? ¿sería conveniente aprovechar para seguir descendiendo? Pensé que no: quizá alguien desde arriba, ante nuestra desaparición, hubiera requerido a la bruja abrir esa puerta para mirar, entonces ella habría desbloqueado la continuación de las escaleras para que nos introdujéramos por ella... encerrándonos de nuevo en otro lugar una vez traspasado el umbral, dejando así libre el primer tramo para que los de fuera comprobaran que allí no había nada ni nadie. Sería la perdición definitiva.

6 comentarios:

aiyana dijo...

Yo que tu escribía una novela. ;)

Herel dijo...

Tendría que rellenar con un montón de descripciones gratuitas para inflar una novela... :D

Chasky dijo...

Me ha encantado lo de teletransportar un clon tuyo, sin duda los sueños son de lo mejorcito de la vida porque puedes hacer cosas que en la realidad es imposible.

Otratazadecafe dijo...

Vale, ahora comprendo por qué dices que no merece la pena perder el tiempo viendo series de televisión, a ti no te hace falta!

juan rafael dijo...

Hola, imagino que es un sueño ficticio porque yo de los míos no me acuerdo.
Gracias por venir a visitarme. Me pasaré de vez en cuando.
Saludos.

Herel dijo...

Chasky, ahí está, la ficción y los sueños superan a la realidad... la pena es que se vean tan borrosos, peor que una peli bajada del emule :D

Taza, mujer, con algo hay que alimentar la caja mágica para que luego elabore historias locas. Cuantos más colores metas en la batidora más colorido será el cuadro.

Juan Rafael, no es ficticio. Para acordarse hay que proponérselo nada más despertar. También te visitaré, me gusta tu forma de contar las cosas.