lunes, 25 de diciembre de 2006

unas palabras

-Ahora que estamos todos reunidos, me gustaría decir unas palabras: zabacequia, zabalmedina, zabarcera, zabatán, zabazala, zabazoque, zabida, zabila, zaborda, zaborra, zacuto y zafariche.
-Y zahareño.
-También.

viernes, 22 de diciembre de 2006

paticidio

De pequeño me gustaban mucho los patitos, te seguían a todas partes y eran muy payasetes y cariñosos.

En la sierra, en la casa de al lado, los vecinos tenían un perro, al que me acercaba de cachorro. Pero según fue creciendo se transformó en un perro guardián muy poco amigable... al igual que mis vecinos. Lo tenían en la puerta de la casa atado con una cadena bastante larga, poco más de la distancia entre la puerta y el límite del porche, de modo que salía hasta la calle. Cada vez que alguien pasaba por delante se lanzaba ladrando hecho una fiera hasta que la cadena se tensaba y lo detenía.

Aquel día salía de mi casa con el patito detrás, y a la vuelta de la esquina apareció de pronto el perro. Me asusté tanto que reculé corriendo, y le metí una patada fatal al pobre pato sin querer.

Me sentí fatal, pero luego dije que lo había matado el perro.

niha

go lo zure des tule men naâi ÿul nes go se aru zau. nihatu go gut zau set bama. ket tul kae-mo go gut zau gut niha fen se haid. nafa go lo bama niha, ket no zau goa tosidoi. dur lora doio-to nagutu.

jueves, 21 de diciembre de 2006

un sobre

José metió el sobre en su abrigo y salió bajando las escaleras apresuradamente, por no esperar al ascensor. Tenía prisa, llegaba tarde. Paró un taxi y subió. El sobre, que asomaba del amplio bolsillo, terminó de deslizarse y cayó. Quedó abandonado en la acera mientras el vehículo se alejaba.

Marta caminaba cabizbaja hacia el metro. Se detuvo en el semáforo, cuando reparó en el sobre que yacía en el suelo. Lo recogió, el semáforo se puso en verde, lo guardó de forma automática en la mochila y prosiguió pensando en sus cosas.
El metro estaba abarrotado, y Martín divisó aquella presa fácil. Disimuladamente abrió la cremallera de la mochila e introdujo la mano buscando algo de valor.
Marta se volteó repentinamente y con mala cara. Aquel hombre empujaba intentando acercarse hasta la puerta de malas maneras. "Perdón" masculló. "Yo también me bajo en ésta" señaló Marta, haciendo que el hombre aguardara en su sitio. "Qué se ha creído".
Los viajeros salieron en tromba en la estación de Moncloa, directos a la salida, menos Martín, que volvió a introducirse en otro vagón.

El carterista se bajó unas paradas más tarde y entró en un local a tomarse un café, muy apetecible en esa fría mañana. Se quitó el abrigo, lo dejó en la silla libre y tomó asiento en su mesa a la vez que hacia un mínimo gesto al camarero para que acudiera.

José terminó su segundo café, Jaime también se había retrasado, más que él, y no se le ocurrió otra forma de hacer tiempo, pues en la calle hacía un frío de narices. Cuando recibió la llamada esperada pagó, se levantó, recogió su abrigo y salió a la calle.
Se acercó hasta el que aguardaba en el quiosco, ojeando la prensa, compró un diario deportivo. Se miraron. José introdujo la mano en el bolsillo derecho, pero el sobre no estaba... un sudor frío recorrió su frente. Jaime le miró con suspicacia.
Respiró aliviado cuando halló el sobre en el bolsillo izquierdo, "juraría que lo metí en el otro".
Le entregó el sobre disimuladamente y se marchó.

Martín se disponía a marcharse y buscó su abrigo, ¡no estaba! Se levantó sobresaltado, aunque por fortuna lo encontró en otra silla "que extraño, juraría que lo dejé aquí mismo".

Cuando José regresó a su casa descubrió que aquel no era su abrigo, su cartera no estaba, pero en cambio había otras tantas de desconocidos.

Cuando Martín regresó a su casa sólo encontró una cartera dentro de su abrigo, ¡sólo una!, cuando estaba seguro de que había birlado cuatro aquella mañana.

Cuando Jaime regresó a su casa, abrió el sobre y en el interior se encontró esta nota:
"Gustavo, me gustas mucho, no me atrevo a decírtelo a la cara, pero quisiera que leyeras esta poesía que he escrito pensando en tí..."

Cuando Gustavo abrió la cartera, ya en su casa, se encontró un extraño sobre introducido en el libro de mates. Lo abrió despreocupadamente. En el interior había un cheque al portador por valor de seis millones de Euros. "Esto ha sido una broma del Rafa, jajaja" pensó.

Al día siguiente dos personas murieron: José de un disparo, y Marta de pena al observar de lejos cómo Gustavo enseñaba el sobre a sus amigos mientras se partían de risa.

martes, 19 de diciembre de 2006

por El Torcal de Antequera

Este fin de semana me bajé hasta Málaga por cambiar de aires y ver a varios amigos. Y el Domingo hicimos una ruta por El Torcal, un lugar de los que a mí me gustan.
El pollo vigilante:
Corredor gélido:
Este bastión con su forma de tronco de pirámide parecía una torre fortificada de la edad media.
En este jardín, a 10 minutos del aparcamiento haciendo la ruta a la inversa, observamos un elemento extraño:
Intentamos llegar hasta el bulto marrón aproximándonos desde abajo y desde arriba, pero no lo alcanzamos, a parte de que se perdía la referencia visual al acercarte. Seguro que se puede llegar, pero no íbamos a dedicar más tiempo. Si alguien va por allí, a ver si logra alcanzarlo y me dice qué era. Nos quedamos con la incógnita.
En la foto no se aprecia bien, pero en vivo cantaba mucho desde la ladera de en frente, parecía la textura del pelaje de una cabra joven, aunque con forma de hongo gigantesco.

A parte del espectáculo visual, las rocas son una delicia, porque se pueden trepar muy bien. Están cortadas en lajas, con numerosos desconchones y aristas que hacen de agarres, y es fácil escalar por las paredes. Por contra, son de piel lisa y resbaladiza, no tienen tanto agarre por rozamiento para andar por planos inclinados como el granito de La Pedriza.

El Torcal parece ser una formación geológica que se fraguó debajo del mar, y ascendió sobre el continente por el choque de placas, así como se creó toda la orografía montañosa de la Andalucía oriental.

viernes, 15 de diciembre de 2006

un regalo

-Aprovechando que vas a venir... tengo un regalo para tí, que te tenía que dar desde hace mucho tiempo. Ya sabrás lo que es.
-No, no me acuerdo.
-Es el libro de S.E.
-¡Anda!, ya ni me acordaba.
-Lo malo es que todavía no me lo he terminado de leer.
...
-No te preocupes, no tocaré tu marcapáginas.

retrato-robot

Varios testigos me vieron en mi última acción. Y ahora mismo el retrato-robot está siendo distribuido a todos los cuarteles de la guardia civil, controles de frontera y aeropuertos.


De modo que me ausentaré una temporada hasta que me sienta seguro.
Al colega transoceánico César también le andan buscando por apología del vandalismo floral al publicar la foto de una margarita deshojada.
No os chivéis ¿eh?

Si también queréis convertiros en forajidos, visitad: Ultimate Flash Face

jueves, 14 de diciembre de 2006

el elefante encadenado

¿Por qué el enorme elefante no se escapaba cuando le dejaban atado a una pequeña estaca que podría arrancar sin problemas?
Porque desde pequeño le habían atado a esa estaca, y todas las veces que intentó zafarse de ella, todas fracasó.

Había aprendido que la estaca era más fuerte, y no se dió cuenta de que con el tiempo él había crecido y ahora él era más fuerte que la estaca. Por confiar en lo que "sabía" no pudo descubrir la nueva realidad.

El cuento original, y más extenso, pertenece a Jorge Bucay.

miércoles, 13 de diciembre de 2006

suerte concentrada

Nunca había tenido nada, jamás la vida le sonrió.
Hasta ese día en el que le salió un trabajo formidable en Alemania, una novia en Canadá y heredó la finca de sus sueños en Argentina.

Entonces decidió... ¡¡¡ Iros todos a tomar por ...!!!

Y se quedó con su mala suerte de siempre... que al menos no le obligaba a renunciar a nada.

martes, 12 de diciembre de 2006

bajo la lluvia

Los bosques eran rojos. Un suelo de hojas muertas rojizas, de helechos amarillentos y anaranjados, y muchísimas setas. Bajo el bosque de pinos crecía un segundo órden de bosque en miniatura de hongos.

La lluvia cayó sin parar, no muy fuerte, pero contínua. A partir de los 1.500 metros había resíduos de nieve escarchada, caída seguramente durante la noche, amontonada en lugares protegidos, aguantando la lluvia.
A parte del agua que caía de arriba, también estaba la que brotaba del suelo por todos sitios, discurriendo bajo placas de hielo. Las brumas avanzaban y retrocedían, subían y bajaban, como si fueran humaredas, dando más o menos visibilidad. Hacia los valles apenas se veía más que una atmósfera grisácea sobre la que despuntaban algunos bastiones pétreos, o sus siluetas.

Bosque rojo
Pedriza con lluvia
Pedriza con lluvia
Pedriza con lluvia
Bosques en La Pedriza

Y la verdad es que este tiempo es el mejor para andar. Al no haber sol el desgaste físico es mínimo. Y además... ¡no me encontré con nadie arriba!, sólo en los primeros tramos con gente bajando.
El único problema son los pies, que al final acaban calados con riesgo de heridas. No sé por qué sospecho que mis botas son de verano, a juzgar por lo poco que impermeabilizan... ¡pero yo en verano no uso botas!

Y el Jueves (las fotos son del mismo día que el post del hielo) hice la gran patosada. Me llevé dos pares de calcetines de repuesto, pero... no los metí en bolsa de plástico. Total, que se me empapó la mochila y se me empaparon de paso los calcetines que iban dentro. Repuestos inservibles.

Cuando regresé al coche, me quité las botas y al volcarlas cayó un chorito de agua de cada una. Los calcetines tuve que escurrirlos bien, como el mocho de la fregona en el cubo.

lunes, 11 de diciembre de 2006

yo oigo!

No es por hacer publicidad, pero me encanta este logo.Lo ví en una marquesina de autobús en su versión sobre fondo negro y me metí en la página web a ver qué era. En este caso la publicidad ha funcionado conmigo, y creo que es porque me pierden los colores y los nombres raros que no suenan a anglicismo.

Parece ser que la filosofía de esta nueva compañía de telefonía que entra en España es la sencillez y las cosas claras. Te vamos a cobrar esto y punto. Me gusta, aunque quizá sea tan sólo la filosofía de marqueting inicial para abrirse un hueco en el mercado. Pasados unos años empezarán a hacer estudios de optimización de beneficio:
Y si bajamos un céntimo tal cosa, mientras subimos dos por el otro lado...
Y si ofrecemos esto... pero luego -en letra pequeña- a cambio de lo otro...

Y cuando empiecen a llamar los comerciales insistentemente: Buenos días, soy Fulanita Fulanítez de Yo-oigo, ¿está el responsable de la telefonía?
Entonces responderé: ¿Cómo? No oigo... no oigo.

Porque otra cosa que no me gusta nada es la filosofía de venta de que el producto que se quiere vender venga a tí, en lugar de ir tú a buscar el producto que necesitas en un momento dado y quieres comprar.

Imagina que llaman a la puerta:
-¿Quién es?
-¡Somos unos tomates! ¡cómpranos, cómpranos!
...
y al rato vuelven a llamar:
-¿Quién es?
-Somos unas lechugas, ¡cómpranos, cómpranos!
...
-¿Sí?
-Soy una enciclopedia con un DVD de regalo y a pagar en en 10 cómodos plazos, ¡cómprame, cómprame!

Por cierto, que la imagen con degradaciones situada en la barra lateral derecha justo debajo de donde pone "sindicación Atom", la hice antes de ver este logotipo. Es un texto en una versión adaptada del alfabeto coreano Hangul y significa "Bienvenido" (goe nua jan). Pero no en Coreano, sino en Toyabamo, un lenguaje inventado.

El Hangul es un alfabeto de diseño, que implantó el rey Sejong el Grande, en el siglo XV, para suplir los altos índices de analfabetismo de su pueblo. Debidos a que el Coreano se escribía hasta entonces con caracteres chinos, quedando la escritura reservada a una minoría.
El término hangul significa "gran escritura" en coreano arcaico y "escritura coreana" en coreano moderno, aunque tuvo muchos otros nombres anteriormente.
En sus comienzos se le intentó denigrar, por parte de la élite intelectual, denominándolo "escritura de mujeres" o "escritura de niños", como escritura de las clases bajas.
Actualmente está perfectamente implantado y ha sustituido al chino. Es un alfabeto bonito, sencillo y racional. A mí me gustó -como el logo de yo.oigo- cuando ví aquellos caracteres en los créditos de la película "Hierro 3".

jueves, 7 de diciembre de 2006

sobre el hielo

Al ver el hielo, me acordé de este cuadro.
Claro que, la foto tiene dos trampas:
1. No es un lago helado sino un charco, luego en caso de romperse, el agua no llegaría ni a los pantalones.
2. Las fracturas no están provocadas por mi peso, sino por el taconazo que le meti al hielo desde fuera para la "foto con grietas"... todo es falso.

Vaale... y tampoco es un charco: metí una bandeja con agua en el congelador para simular la superficie helada...
...pero me dejé abierta la nevera y se congeló también el jardín.

martes, 5 de diciembre de 2006

verdad múltiple

Fernando y José viajaron a una remota zona de oriente, en la que pasaron una semana, cada uno en un poblado, separados por una gran montaña. Durante ese tiempo se dedicaron a aprender el vocabulario de las lenguas allí habladas, cada cual en su poblado, mediante el procedimiento de señalar con el dedo y requerir a los lugareños la definición del objeto.
De regreso a su país, intercambiaron conocimientos.
En mi pueblo, hombre se dice "ren" - decía Fernando.
En el mío al señalar a un hombre me indicaron "Kae"- decía José.
-Vaso se dice "anj" - Vaso se dice "ula" en el mío.
-Mujer se dice "kon" -Mujer se dice "Liu"
-Montaña se dice "shan" - Montaña se dice "nuba"
-Ventana se dice "toi" - Ventana se dice "yao"
-Piedra se dice "rai" - Piedra se dice "kul"
-Vaca se dice "mou" - Vaca se dice "godexunjlioning"

Concluyeron que cada pueblo hablaba un idioma diferente.
...

Tao y Chin viajaron a una remota zona de la meseta castellana, en la que pasaron una semana, cada uno en un poblado, separados por una gran depresión. Durante ese tiempo se dedicaron a aprender vocabulario de las lenguas locales allí habladas.
De regreso a su país intercambiaron conocimientos.
En mi pueblo al señalar a un hombre me indicaron "hombre" - decía Tao.
En el mío al señalar a un hombre me indicaron "Javier" - decía Chin.
-Vaso se dice "vaso" - Vaso se dice "cristal" en el mío.
-Mujer se dice "mujer" - Mujer se dice "Marialuisa"
-Río se dice "río" - río se dice "agua"
-Ventana se dice "ventana" - ventana se dice "lacasademivecino"
-Piedra se dice "piedra" - Piedra se dice "roca"
-Vaca se dice "vaca" - Vaca se dice "andalárgateyapesao"

Concluyeron que cada pueblo hablaba un idioma diferente.
...

Pero luego llegó Kiu, que había pasado una semana en el mismo pueblo que Chin, y le corrigió:
-Hombre se dice "¿quién?", Vaso se dice "¿tienes sed?", Mujer se dice "¿Esa?", río se dice "Duero", ventana se dice "afuera", piedra se dice "suelo" y vaca se dice "Lamarcelina".

Entonces concluyeron que, puesto que el informador de Chin era rubio, además de los dos lenguajes ya documentados, los rubios hablaban un tercer lenguaje distinto.

lunes, 4 de diciembre de 2006

Amiga-500

Esto era lo que te salía nada más encender el ordenador (mete un disco, que esto no tiene disco duro ni ná). Metías el disco, la disquetera empezaba a hacer ruidos... frrr-kataplaf-kataplaf-rffff... y al rato ya podías empezar a hacer algo.
Este programa servía para dibujar, Deluxe Paint, nada de retoque fotográfico ni escáner ni cámaras digitales. A rellenar pixeles con el ratón.

Esta cosa llamada SoundTracker y más tarde ProTracker (aunque la primera versión que tuve era una especie de tuneo llamado "Startrekker") servía para hacer música, con cuatro canales de sonido únicamente que había que aprovechar haciendo malabarismos.

Con este lenguaje de programación se podían hacer videojuegos de forma muy sencillita, con gráficos (dibujados con Deluxe Paint), música (hecha el Protracker), animaciones... lo usé hasta para hacer generadores aleatorios de personajes para fichas de juegos de rol. (Es que no sabía programar en otra cosa)

Por entonces se copiaban muuuuuuuuuuuchos discos, que hacían... frrr-kataplaf-kataplaf-rffff... rikirikirikiriki-ptaptaptapta...

Cuando te salía esto, significaba que "kaput". Equivale al pantallazo azul de Windows.
Adioos!

sábado, 2 de diciembre de 2006

no mires a la niebla


me gusta tu cara

No me importa que la señora que está delante se esté enrollando aprovechando la atención que le tienes que dar por estar detrás de un mostrador.
Me gusta tu cara y no tengo prisa, me infundes serenidad, me encantan tus ojos verdes, o miel. Me encanta tu naturalidad, no te escondes detrás de artificios, con tus defectos y virtudes.
Cuando me llega mi turno soy breve, pero te miro con complicidad disimulada y con simpatía, sin descaro.
Me gusta tu cara. Cuando estoy cómodo no tengo prisa.
Me gusta tu cara, pero mañana te habré olvidado.

viernes, 1 de diciembre de 2006

destrozando una poesía

Todo pasa y todo queda,
en una huella al pisar,
pisar hollando caminos,
rodados al asfaltar.
(alt: de hollar y no de follar)

Nunca perseguí a la Gloria,
ni a la Juani ni a la Sonia,
la que mola es la Asunción;
yo amo los mundos sutiles,
y la cerveza de barriles,
y los tacos de jamón.

Me gusta verlos pintarse
sobre sus caras dibujar
y luego toca temblar
con lo que cuesta lavarse...

Nunca perseguí a la Gloria.

Caminante, son tus huellas
el sello de tus zanca'as;
caminante, no hay camino,
y a mí me importa un comino..

Al andar se hace camino
y al girarse para atrás
se desanda el camino andado
que luego hay que volver a andar.

[y andando y recorriendo
recorridos andarás
anda,
que quien no corre vuela
y si no vuelas andando irás

andando y desandando
andurriales donde andarán
dando nados donde hondo
ahondando donde nada dan. ]

Caminante no hay vereda
y a mí me importa una... gleba.

Hace algún tiempo en ese lugar
donde hoy los robles se visten de pinos
se oyó la voz de un poeta gritar
"M'escoñé desde un altillo,
y quiero ir al hospital..."

Golpes golpes, ruedo ruedo...

Murió el poeta sin fuerzas ni ná,
para escribir su último alejandrino.
Desde su cama le oyeron gritar,
"Tropecé en el barranquillo,
caí y me puse a rodar..."

Golpes golpes, ruedo ruedo...

Cuando el jilguero no puede cantar,
hecho estofado con salsa al ajillo,
cuando la nata se pone en el flan.
"Caminante no hay camino,
y a mí me importa un pepino..."

Golpes golpes, ruedo ruedo.

[original: Cantares]
[musicado]