domingo, 14 de enero de 2007

poema fonético 2

Viento que suspiras, a la noche cerca ve.
Bien toque sus piras, al anochecer cavé.

Viento, dominó, vela; calla mentirosa.

Ví en todo mi novela, caíame en tí, rosa.

oOo

Él abre la tasca ido, medio soñando estaba.
El abrelatas caído me dió Sonia. Ando, ésta va.

oOo


5 comentarios:

Eulalia dijo...

Joé, Herel.
Sabes hacer mejores cosas: aunque como ejercicio es posible que esté bien, desmerece del resto de tu blog. (o es que estoy cansada, no sé. :)) )
Un beso

Herel dijo...

La franqueza siempre es bienvenida aquí, Eulalia. :)
No pega y sí, porque la temática del blog es variada. Esto es un poco como un diario, si pongo estos pasatiempos es porque no tengo nada importante que contar o porque no quiero contar lo que hay y me escondo en palabras vacías, degradadas a juguetes como piezas de un "tente" para hacer formas.

César dijo...

Yo discrepo, respetuosamente, de la opinión de Eulalia. Estos "poemas fonéticos" me han gustado mucho. No como poesía en sí, claro, sino justamente como eso que dices, Herel: palabras vacías ensambladas como un tente. De una manera la mar de ingeniosa, agrego.

De hecho, intenté hacer uno, como quizá sabes, pero los encuentro endemoniadamente difíciles de hacer...

Eh bueno, es que no he tenido tiempo de sentarme a pensar con calma. Estos días, entre el trabajo, la familia y los corajes, no me ha quedado tiempo de nada...

Sí, ajá, eso es, no he tenido tiempo. No son mis limitaciones intelectuales, para nada :)

Herel dijo...

César, seguro que no... en verdad tu problema es que se te da mejor ensamblar palabras con sentido. ;)

Alfa dijo...

Teniendo en cuenta que mañana tengo examen de Fonética en la universidad...
me ha hecho gracia jajaja :)

Mola

Alba