Un día un hombre soñó con la palabra "Ixumiz", y decidió que debía conseguir uno. Cada vez que entraba a una tienda preguntaba si tenían Ixumiz, obteniendo como respuesta caras raras de extrañeza o disculpas que intentaban disimular una temida ignorancia.
Hasta que un día, un tendero le dijo que sí, que tenía Ixumiz.
Y lo compró, fuera lo que fuera eso.
A mí me han dado ganas de tener uno, parece achuchable.. xDDD
ResponderEliminarIgual es uno de esos a los que atizas con el cepillo del pelo :D
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